los poetas nunca mueren... solo fingen estarlo
Si un beso de tu boca,
supusiese muerte atroz,
si el roce de tu piel
infinita penitencia.
Mas yo aunque maldigo mi suerte,
no tengo miedo a la muerte
y si rozar con mis labios el paraiso
supone pecado alguno.
Dios se apiade de mi alma,
pues el infierno me espera,
y es que por un beso tuyo,
se dejaria morir cualquiera.
supusiese muerte atroz,
si el roce de tu piel
infinita penitencia.
Mas yo aunque maldigo mi suerte,
no tengo miedo a la muerte
y si rozar con mis labios el paraiso
supone pecado alguno.
Dios se apiade de mi alma,
pues el infierno me espera,
y es que por un beso tuyo,
se dejaria morir cualquiera.
